GRUPO CRYO

Cáncer de Pulmón

Tratamiento para el Cáncer de Pulmón

El cáncer de pulmón es la principal causa de muerte por cáncer, a nivel mundial. Esto se debe en gran parte a que inicialmente es asintomático y generalmente se descubre en etapas avanzadas. Recientemente se ha demostrado que el diagnóstico de cáncer en los pulmones mediante tomografía computarizada, tiene grandes beneficios, y la implementación de esta práctica está creciendo. Una vez que se sospecha, el cáncer de pulmón debe diagnosticarse y clasificarse, y existen pautas recientes para ayudar en este proceso. El tratamiento está determinado por el tipo de cáncer de pulmón y el estadio de los pulmones con cáncer y existen varias terapias personalizadas que no existían hace tan solo unos años.

Signos y Síntomas

Los síntomas iniciales del cáncer de pulmón más comunes son:

Si el cáncer de pulmón se propaga a otras partes del cuerpo, puede causar:

Si nota alguno de los síntomas recurra a un profesional de salud.

Tratamientos

Para el cáncer de pulmón en estadio temprano o pequeñas metástasis en el pulmón, la resección quirúrgica, es el tratamiento preferido. La extensión de la extracción depende del tamaño y la ubicación del tumor, así como de la reserva pulmonar preoperatoria del paciente. La quimioterapia se recomienda como tratamiento del cáncer de pulmón en estadio II completamente resecado, pero generalmente no en el estadio I.

Tratamiento para cáncer focalizado

Para aquellos con cáncer de pulmón en estadio temprano (I), que no son candidatos para cirugía, se recomienda la ablación percutánea para tumores periféricos seleccionados, como ablación por radiofrecuencia, microondas, crioablación.

La crioablación del tumor pulmonar, tiene una tasa de control tumoral local del 94,6% a los 12 meses de seguimiento, asociada a un tratamiento bien tolerado. La crioablación percutánea para el tratamiento de metástasis pulmonares es segura y las tasas de control tumoral local temprano son prometedoras y competitivas con otras tecnologías contemporáneas (de Baere y colaboradores, J Thorac Oncol. 2015).

La ablación térmica se usa principalmente para el tratamiento de tumores pequeños e irresecables, para pacientes quienes han presentado resistencia al tratamiento de quimio/radioterapia o que NO son candidatos quirúrgicos, como, por ejemplo:

  • Pacientes con obesidad
  • Pacientes con enfermedades crónicas (diabetes, hipertensión, cirrosis, etc.)
  • Pacientes que no pueden tener anestesia general
  • Pacientes con enfermedades cardiacas severas

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